En un mundo que se encuentra en constante cambio y evolución como en el que nos encontramos actualmente, quedarse donde y como se está, supone una regresión. Si el panorama y la visión están cambiando y seguimos haciendo lo mismo lo más probable es que nuestra empresa llegue a la desaparición. En este sentido, innovar se ha convertido más que en un valor agregado, en una necesidad y también en el verdadero motor de la empresa, ya que innovar implica la transformación y crecimiento.

Por todo lo anterior, es importante desarrollar la habilidad de adaptación al medio, adaptación no solo implica adquirir nuevos aprendizajes sobre el uso de distintas herramientas, sino también la capacidad de aprender a desaprender o a tener una actitud de mentalidad abierta y de predisposición al cambio.

Ahora bien, si conseguimos adquirir una visión innovadora y abierta al cambio, no importará el escenario o cambio tecnológico que se nos ponga por delante, ya que estaremos preparados para afrontarlo. Hay que entender que la definición de innovación, tiene 4 partes clave: con qué se genera el valor, qué tan distinto es al que ya se generaba, a quién se le entrega y el efecto que tiene en el negocio.

El objeto de innovación pueden ser productos, servicios, marketing, procesos, tecnología, organización, personas, etc.

Hablar de actualidad es hablar de competencia, cambio, adaptación, tecnología, decisiones, avance, desarrollo, progreso y, hablar de todo ello, es hablar de innovación y creatividad. 

En las organizaciones se ha hecho visible la innovación y creatividad como un eje importante para resolver los desafíos y lograr el éxito, una herramienta indispensable para hacer frente a la creciente competencia y para evitar el rezago y la marginación en el mundo empresarial.

Las personas hacen a la organización, por lo que estas personas independientemente del puesto que ocupen, pueden y deben ejercer la innovación y creatividad en el desempeño de sus tareas y en la resolución de problemas, la innovación resulta entonces, responsabilidad de todos.

Ser una persona innovadora o creativa no significa que todo el tiempo se nos tiene que estar ocurriendo infinidad de ideas novedosas, eres una persona innovadora si:

Innovar representa transformar nuevas ideas en resultados. Hay tres aspectos importantes que considerar en esta aproximación a la innovación.

Primero, la generación de ideas, si estas no obtienen ningún impacto deseado, no constituye innovación. Generar más ideas per se no nos hace más innovadores.

Segundo, cuando la aplicación de una nueva idea se puede llevar a cabo sin alterar el día a día, esta corresponde más al ámbito de la mejora continua que de la innovación.

Lo que distingue a la innovación de la mejora es que la transformación de la idea innovadora requiere hacer algo distinto de lo que la empresa venía haciendo en el pasado.

Tercero, la innovación exige y se apoya en un nuevo desarrollo, ya sea algún aspecto de conocimientos de base, o un nuevo proceso o un enfoque de dirección, en definitiva algún desarrollo interno que complementa a la nueva idea inicial.

Innovar hoy facilita innovar mañana.

Ahora, cuando quieras platicar de innovación con tu equipo, tu jefe o incluso en tus reuniones sociales, no olvides tomar en cuenta el valor en los 4 puntos clave: 

-Objeto (producto, servicios, procesos, marketing)

-Grado (¿qué tan nuevo es?)

-Receptor (¿a quién se le agrega el valor?)

-Efecto (impacto que genera en el negocio).